Las personas que tienen fibrosis quística (FQ) o que cuidan a alguien con FQ tienen dos a tres veces más probabilidades de presentar depresión, ansiedad o ambas cosas, en comparación con la población general.*
Hay guías diseñadas a ayudar a los equipos de cuidado de FQ, para que puedan atender eficazmente a las personas con FQ y sus familias cuando hay depresión, ansiedad o ambas cosas.
Las siguientes recomendaciones tienen el propósito de ayudarle a comprender que aunque en la vida hay momentos de tristeza y ansiedad, la depresión y ansiedad persistente son condiciones que deben ser tratadas como parte de su salud y bienestar emocional en general.
¿Qué es la depresión?
La depresión es una enfermedad médica común, que afecta negativamente la forma en que usted se siente, piensa y actúa. A diferencia de los episodios ocasionales de tristeza o desconsuelo, sin tratamiento la depresión clínica puede durar mucho tiempo, hasta semanas, meses o años. Las personas que tienen depresión pueden presentar períodos de tiempo muy largos en los cuales se sienten acongojadas, sin esperanza y pierden el interés en las cosas que normalmente disfrutarían.
¿Qué es la ansiedad?
La ansiedad es una emoción normal, que va y viene como respuesta a los temores o preocupaciones que surgen por cambios en la salud, el trabajo, las relaciones personales o el dinero. Una persona puede tener un trastorno de ansiedad cuando la ansiedad no pasa, se va empeorando con el tiempo y evita que la persona participe en las actividades comunes de la vida diaria.
Además de la ansiedad generalizada que pueden presentar muchas personas con FQ y los cuidadores en la familia, algunas personas también tienen una forma muy específica de ansiedad relacionada con los procedimientos médicos.
¿Qué puede hacer usted si piensa que está deprimido o tiene ansiedad?
Aunque los sentimientos de la depresión y ansiedad pueden ser una respuesta normal a la vida con FQ, hay cosas que puede hacer para evitar la depresión o la ansiedad, para obtener ayuda y para reducir el riesgo de que la depresión y la ansiedad regresen una vez tratadas.
El Comité Internacional de Guías en Fibrosis Quística (patrocinado por la Fundación sobre la Fibrosis Quística y la Asociación Europea de Fibrosis Quística) recomienda lo siguiente para detectar y tratar la depresión y la ansiedad, como parte de la atención integral en la FQ:
- Aprender destrezas nuevas para afrontar las situaciones: Su equipo de cuidado médico de FQ le ayudará a encontrar formas eficaces para manejar el estrés y le proporcionará información constante y apropiada de acuerdo a la edad, sobre cómo afrontar una enfermedad crónica como la FQ.
- Haga la prueba de detección: Si usted tiene FQ y al menos 12 años de edad o si usted cuida a una persona con FQ y esa persona tiene 17 años o menos, se le pedirá que llene dos formularios cortos de detección.
- Busque ayuda: Si los resultados de la prueba de detección sugieren que usted está luchando con la depresión, la ansiedad o ambas cosas, su equipo de atención de FQ le recomendará una evaluación más profunda y podría recomendar un tratamiento.
¿Qué puede hacer para estar bien?
Si tiene síntomas leves o reconoce los signos iniciales de la depresión, la ansiedad o ambas, converse con su equipo de cuidado médico de FQ. Pueden ayudarle a mantener su salud emocional.
Las siguientes son algunas formas de prevenir que los problemas de la depresión o la ansiedad empeoren y limitar su impacto en su vida o en la vida de sus seres queridos:
- Converse con alguien, preferiblemente cara a cara. Muchas personas con depresión se repliegan en sí mismos y se aíslan de los demás.
- Reúnase con personas que le levanten el ánimo.
- Evite el consumo de bebidas alcohólicas o drogas.
- Siga con su plan de tratamiento para la FQ.
- Mantenga buenos hábitos de sueño. Haga el esfuerzo de dormir lo suficiente. Acuéstese y despiértese más o menos a la misma hora. Evite quedarse acostado cuando no está durmiendo.
- Salga y esté en contacto con la naturaleza unos 30 minutos al día.
- Encuentre el tiempo para hacer las cosas que disfruta.
- Manténgase físicamente activo. El ejercicio ayuda a reducir el estrés.
- Practique las técnicas de relajación.
- Evite la cafeína y la nicotina, porque pueden aumentar los niveles de ansiedad.
- Busque un grupo de apoyo. Se sentirá menos solo conversando sobre sus problemas con personas que pasan o han pasado por lo mismo.
Estas actividades no sustituyen la atención profesional, pero pueden ser una verdadera ayuda para mejorar el ánimo.
Cuando no se trata
La depresión, la ansiedad o ambas, pueden afectar su salud física y emocional e interferir con su capacidad para cuidarse a sí mismo o a su hijo.
Las personas que tienen ansiedad, depresión o ambas y no reciben tratamiento:
- Tienen menos probabilidades de manejar eficazmente sus planes de tratamiento.
- Suelen tener una peor función pulmonar.
- Tienen un menor índice de masa corporal.
- Necesitan más hospitalizaciones.
- Con frecuencia, tienen más gastos en la atención de la salud.
- Tienen una menor calidad de vida.
¿Qué cubren los seguros?
La ley del Cuidado de Salud a Bajo Precio (
Todos los programas estatales de
A veces, las aseguradoras tienen diferentes políticas sobre la cobertura de tratamiento para asuntos de salud mental, como la depresión y la ansiedad. Algunos cubren una cantidad limitada de visitas para conversaciones terapéuticas. Algunos solo cubren los medicamentos. Revise los documentos sobre la cobertura de su seguro o llame a su asegurador, para obtener información sobre el tratamiento de su depresión o ansiedad.
La Fundación sobre la FQ puede ayudar a que las personas con FQ y sus familias comprendan bien sus opciones de cobertura de seguro y se comuniquen con los recursos apropiados.
Llame a 844-COMPASS (844-266-7277) o envíe un correo electrónico a compass@cff.org.
* Quittner AL, Goldbeck L, Abbott J, Duff A, Lambrecht P, Solé A, Tiboshc MM, Brucefors AB, Yüksel H, Catastini P, Blackwell L, Barker D. Prevalencia de la depresión y la ansiedad en pacientes con fibrosis quística y de los padres cuidadores : Resultados sobre el Estudio Internacional de la Depresión Epidemiológica en nueve países. Thorax. 2014;69:1090–1097. doi:10.1136/thoraxjnl-2014-205983.